Dime cuántas veces te M4ŠTÛRB4Š? y te diré que tan inteligente eres.?

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Dime cuántas veces te M4ŠTÛRB4Š? y te diré que tan inteligente eres.?

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Que se te iba a caer la mano, que se te iba a llenar de pelos o se te iba a secar…probablemente escuchaste alguno de estos mitos en relación a esos  momentos que pasas con Manuela o Manuel (porque claro, hombres y mujeres lo hacen). Y aunque unos te dijeron que era bueno, otros que era malo, en realidad es algo que le hace bien a tu cuerpo y a tu cerebro, un estudio del Instituto Kinsey de Estados Unidos lo confirmó.

La investigadora Debbie Herbenick, encargada del estudio, aseguró que las personas que se dan amor cotidianamente demostraron ser más inteligentes tanto en el aspecto emocional como en el práctico, digamos que quienes tenían más preparación académica demostraban más amor por ellos mismos. El estudio se aplicó entre 6 mil personas de entre 14 y 90 años de edad. 

En sus resultados encontró que quienes se dan amor de 5 a 7 veces en la semana, son muy inteligentes ya que no sólo pueden resolver sus problemas sino también los que son ajenos. 

Por su parte, quienes se encuentran con Manuel o Manuela de 3 a 4 veces por semana, gozan de la inteligencia suficiente para resolver sus problemas sin ayuda, son el promedio de la población.

Quienes se consienten 2 o menos veces por semana resultaron ser los menos favorecidos, ya que ellos no fueron capaces de resolver problemas y debieron solicitar ayuda. 

El estudio encontró que el darse amor, da una mayor sensación de bienestar al cuerpo, les ayuda a descansar adecuadamente, reducir sus niveles de estrés, mantener el buen humor, buena salud y además, reduce el riesgo de enfermedades. Estos beneficios hacen que la persona se mantenga alerta en todo momento y que pueda resolver cualquier percance que se le presente. 

Debbie Herbenick agregó que en caso de contar con pareja, los individuos deberían mantener encuentros cotidianos y tratar de que ambos llegaran al punto máximo para asegurar el bienestar de su organismo, de lo contrario pueden recurrir a la estimulación propia.

¿Estás de acuerdo con los resultados de esta peculiar investigación?

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